"Los países están viendo que tener todo en una sola moneda puede traerle problemas", comentó a Sputnik el economista peruano Carlos Aquino, asegurando que "hay muchas posibilidades" de que la moneda china, el yuan, se consolide cada vez más como la moneda utilizada para los intercambios entre América Latina y China o Rusia.
La conveniencia de apostar por el yuan fue defendida por el presidente ruso, Vladímir Putin, durante su encuentro con su par chino, Xi Jinping: "Estamos a favor del uso del yuan chino en las liquidaciones entre Rusia y los países de Asia, África y América Latina".
Aquino, director del Centro de Estudios Asiáticos de la Universidad Mayor San Marcos de Perú, consideró que la acumulación de sanciones aplicadas por EEUU está llevando cada vez a más países a considerar una alternativa al dólar en sus transacciones internacionales. Así, el yuan aparece como una posibilidad más fuerte y ya no exclusiva para el comercio con China.
El experto consideró que "lo que está pasando en Europa va a acelerar este proceso porque nadie quiere ser sancionado por EEUU y que le congelen sus fondos financieros y porque el mundo se está volviendo cada vez más multipolar y hay que diversificar".
"En muchos países, los bancos centrales están aplicando una regla que tenemos los economistas: no poner todos los huevos en la misma canasta porque se te rompe la canasta y perdiste todo", ilustró.
Por eso, aseguró que crece la cantidad de países que ven en el yuan una alternativa más apetecible para intercambios comerciales, no solo para el creciente flujo comercial entre América Latina y China, sino también para los intercambios con Rusia y otros países asiáticos, un campo que también tiene perspectivas de crecimiento.
En ese sentido, Aquino recordó que "hace 10 años el 80% del comercio entre China y Rusia era en dólares; ahora ya el 90% es en yuanes" y aventuró que "es probable que eso pase también con América Latina".
Ampliar su uso a otras regiones que no sean China permitiría, de acuerdo al especialista, solucionar las desventajas que el uso del yuan puede tener para los países que venden más de lo que compran al gigante asiático, algo común para los países latinoamericanos.
"Si China nos paga todo con yuanes, esos yuanes solo pueden ser usados para comprar otros productos chinos. Eso podría cambiar si esos yuanes que se reciben pueden usarse para comprar productos a Rusia o a otros países que acepten el yuan como moneda", destacó.
Para Aquino, si el yuan "se internacionaliza" y comienza a ser utilizado para el comercio internacional con Rusia y otros países asiáticos, eso sería beneficioso para países latinoamericanos como Brasil, Argentina, Chile o Perú, que actualmente tienen una balanza comercial superavitaria con el gigante asiático y, por tanto, podría tener un excedente de yuanes.
Pero además, el experto recordó que la moneda china no solo podría hacerse más importante para el comercio internacional, sino como moneda de reserva para otros países.
En ese sentido, recordó que países sudamericanos como Argentina o Chile ya tienen parte de sus reservas en yuanes, gracias a acuerdos firmados en los últimos años con el Banco Popular de China, banco central del país asiático.
"El 60% de las reservas mundiales está en dólares, pero hay un 3% o 4% que está en yuanes, algo impensado hace 20 años", señaló.
Aquino advirtió que el camino puede más largo para que el yuan se convierta en una moneda atractiva para el ahorro de las familias, algo que actualmente sí sucede en muchos países con el dólar. "La gente quiere dólares no porque quiera viajar a EEUU, sino porque no hay control de capitales. En teoría, uno puede comprar todo lo que quiera con dólares", aclaró, señalando que los extranjeros aún no pueden hacerse libremente de cantidades ilimitadas de yuanes.
Sin embargo, opinó que "el Gobierno chino es consciente de que tiene que hacer al yuan más atractivo" de manera de que cada vez menos población en el mundo dependa del dólar estadounidense.
Con información de Sputnik
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